Intentando
devolver al usuario el control de la información que acumula en sus
servidores, Google lanzó una herramienta digital llamada My Activity,
que permite seguir el rastro virtual de las actividades consumadas en
Internet y también borrar aquellas que uno considere inconvenientes.
Y
como la publicidad que llega al celular y a la PC es personalizada, es
decir que muchos de los avisos que aparecen tienen directa relación con
los sitios y temáticas que uno navegó antes, ahora, de algún modo, el
usuario podrá comenzar a tener algo más de control sobre los avisos que
le aparecen en su pantalla.
El relevamiento diario que Google
efectúa sobre el comportamiento de cada usuario, aparece en My Activity
(https://myactivity.google.com) que se activa al ingresar mediante una
cuenta de Gmail.
Desde este espacio se pueden descubrir los
registros almacenados en forma cronológica de todas las acciones que se
realizaron en cualquiera de los productos de Google, sea desde la
computadora o el móvil. “La idea es darle a las personas el control de
lo que quieren que quede alojado y lo que no”, dijeron a Clarín desde
Google.
La actividad puede consistir en buscar una dirección en
Google Maps, consultar un dato en el buscador, los videos que uno
recorrió en YouTube, las fotos que subió a Google Photos, las app que
descargó o las tarjetas que utilizó de Google Now. Todo resumido en una
línea de tiempo.
Como el reconocimiento de la información está
asociada a una cuenta determinada, My Activity no alista aquellos
movimientos que fueron efectuados fuera del radar de Gmail, es decir, en
forma anónima. Tampoco Google tiene registros de la navegación desde
navegadores de otras empresas, como Internet Explorer o Mozilla, ni se
navegó en una ventana anónima de Chrome.
Ese cúmulo de
información privada Google la utiliza en tiempo real, para adaptar los
anuncios que publica a través de sus propios servicios y enviarlos en
forma dirigida a cada usuario. Pero ahora, el usuario tiene la potestad
de personalizar la publicidad que quiera que aparezca en Ad Sense, por
lo que se podrá elegir entre las distintas categorías. Ahora bien, si se
borran algunos historiales, puede que la información que brinda el
buscador, por ejemplo, no sea tan efectiva. “Si luego de borrar
registros geográficos le preguntás a Google dónde compro flores,
probablemente ya no te ofrezca datos de una florería que está cerca de
tu casa”, ejemplifican desde Google.
Como si se tratara de un
historial, My Activity también puede filtrar los resultados acumulados
por fecha o por la palabra clave que se especifiquen. Una vez mostrados
se pueden eliminar actividades específicas, temas completos o,
selectivamente, desactivar ciertos tipos de seguimiento como el
historial de ubicaciones o información del dispositivo. Este no es el
primer ejercicio de transparencia que ensaya Google. En 2009 presentó
Dashboard, en donde detallaba la información que acumulaba de cada
servicio, aunque no se podía modificar su contenido.